Por fin, se acabó la gripe.

Esta temporada de gripe ha llegado a su fin.
Según el Instituto de Salud Carlos III dependiente del Ministerio de Sanidad, la semana pasada el número de casos de gripe llegó finalmente a un nivel bajo. Esta temporada hemos tenido una epidemia de gripe similar a la de hace dos años, con un pico epidémico máximo en enero justo tras las navidades.




LOS PRINCIPALES AFECTADOS DE LA GRIPE SON LOS NIÑOS.
Aunque se asocia la gripe a una enfermedad de los ancianos, realmente el mayor número de casos de gripe se da en los niños, fundamentalmente en los menores de cuatro años, que padecen fiebre alta, malestar general, escalofríos...
Las principales complicaciones de esta epidemia de gripe en los niños son las otitis y las neumonías bacterianas, que aprovechan la debilidad dejada por el virus de la gripe para infectar al niño y provocar una infección secundaria.

LA PRINCIPAL MEDIDA DE PREVENCIÓN ES LA VACUNA.
La principal medida de prevención de la gripe es la vacuna, vacuna que se fabrica cada año durante el verano en función de las cepas de virus gripal aisladas en el invierno austral durante nuestro verano (las cepas de gripe que circulan por Argentina o Australia durante nuestro verano), del mismo modo que las vacunas de estos países dependen de nuestra epidemia de gripe.

Si bien la recomendación de las autoridades sanitarias es la de vacunar a ancianos o a personas de riesgo hay que saber que CUALQUIER NIÑO PUEDE VACUNARSE DE LA GRIPE si sus padres lo desean desde los seis meses de edad, si bien para que sea eficaz debemos vacunarnos antes de la temporada de gripe de invierno.

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